Quizás lo hayas optado por decisión propia o alguien te a impulsado a hacerlo, pues bien amigo, decirte que ser costalero no es ponerte un costal y una faja y pasearte, no es un disfraz , ser costalero implica realizar un esfuerzo junto con tus compañeros que durante un ensayo o la misma salida será más que eso puesto que el hermanamiento es total , y no te quepa duda que con la unión del "todos a una" brotará una sonrisa de satisfacción grandiosa la cual hará que en tu estomago broten unas mariposas que querrán seguir disfrutando de tal bendito oficio.
Cada uno de los hombres de abajo que hoy en día pueden sentirse orgullosos de pertenecer a las cuadrillas de Sevilla empezamos desde cero, con nuestro padre fuera del paso pendiente de no lastimarnos , con nuestros amigos y conocidos, con nuestra madre con su agua y bocata para siempre coger fuerzas. Estos son los recuerdos más bonitos de los comienzos, tu primera vez cuanto de metes, sientes esa calor, miras a tu alrededor y ves tus compañeros nerviosos con ganas de empezar. ¿Pesará? ¿Podré con él? piensas.. sientes miedo a no poder con los pocos kilos que portas y que a tu edad y estatura más que suficientes son.
Las cruces de mayo están para absorber,aprender y ponerlo en práctica , para experimentar que se siente, no para cachondeo, disfrutar es el objetivo, pero disfrutar haciendo las cosas bien , escuchando y obedeciendo a los capataces, el costalero no es costalero hasta su retirada puesto que no eres nadie para dar lecciones. SE HUMILDE ANTE TODO.
Recuerda mi amigo, tu eres el futuro de Sevilla debajo de los pasos, aprende, aprende y aprende y lleva la humildad por bandera siempre, esto es un oficio que tiene cientos de años y no es nada fácil. Nada más, disfruta COSTALERO.
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